En esta nueva edición del Club Unicentro, las letras no solo se leen, se viven; la escritura y el lenguaje se convirtieron en un puente hacia lo infinito.
Esta vez la dinámica se alejó de lo convencional; fueron dos encuentros que invitaron a explorar la escritura desde otros ángulos.
Un viaje literario con el Club Unicentro
Todo esto, guiados por la sensibilidad y la creatividad de @sobreviviendoentreletras.
El primer taller, titulado “La Poesía, un camino hacia la infinidad”, abrió las puertas a un viaje literario profundo; desde las 10:00 a.m., los participantes se sumergieron en los estilos poéticos.
Además, descubrieron recursos que transforman simples versos en experiencia emocionales.
Fue un espacio para aprender, pero también para sentir; aquí, las palabras escritas parecían tener eco, como si el papel fuera un espejo del alma.
El segundo encuentro llevó la escritura a un plano visual. “Tinta y Alma: Creando caligramas desde el corazón” fue más que un taller: fue una revelación.
El público conoció la historia de los caligramas, una forma de arte donde el texto se convierte en imagen, y la imagen en mensaje.
Libros, letras y voces
Una de las dinámicas fue que, a través de fotografías cuidadosamente seleccionadas, cada participante creó un poema que no solo se leía, sino que se contemplaba.
El resultado fue una galería espontánea de emociones trazadas con tinta.
Como dato: si te estás preguntando qué es un caligrama, es un poema que adopta una forma visual relacionada con su contenido; es una fusión entre la literatura y el dibujo.
En este arte, el significado se refuerza con la silueta que lo envuelve; escribir un caligrama es como pintar con palabras.
Se necesita intuición, ritmo y una dosis de valentía creativa.
Unicentro Maracay se llenó de poemas
La edición culminó este domingo 26 de octubre con un evento que fue íntimo como inspirador. El “Club Unicentro: Escritura” invitó a todos los que deseaban compartir su obra a llevar un poema y leerlo frente al público.
Será un espacio de escucha, de conexión y de celebración de la palabra escrita.
También, ¡hubo intercambio de libros!, porque cada página compartida es una historia que encuentra un nuevo hogar.
Unicentro Maracay sigue apostando por experiencias que nutren el alma. Y este Club, más que una actividad, se ha convertido en un refugio para quienes creen que escribir es una forma de existir.
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